En la ciudad de Nueva York, en el edificio de Naciones Unidas, del l5 de Marzo al siete de Abril de l995 se llevó a cabo la preparación para la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer: Acción para la Igualdad, el Desarrollo y la Paz, que se llevará a cabo en la ciudad de Beijing, China, del cuatro al 15 de Septiembre de 1995. Participaron cerca de 180 diferentes países del mundo entero. Honduras estuvo representada por tres personas: Lic. Marta Lorena de Casco, como Jefe de la Delegación, Lic. Leticia de Casanova y esta servidora. En esta conferencia preliminar se discutió el documento borrador, omitiendo, agregando, reconstruyendo o mejorando su contenido y lenguaje, para poder usarlo después en Beijing en la reunión definitiva. El documento estaba dividido en varias secciones y entre las principales podemos mencionar: la pobreza que afecta a la mujer, desigualdad en materia de salud, la violencia contra la mujer, consecuencias de los conflictos armados, desigualdad de acceso a la educación, desigualdad en materia de sanidad, desigualdad en el ejercicio del poder, falta de mecanismos para promover el adelanto de la mujer, insuficiente uso de los medios de difusión para promover las contribuciones positivas de la mujer a la sociedad, otros. Todos los puntos tratados eran excelentes porque se trata de darle a la mujer el lugar que le corresponde en la sociedad al lado del hombre y como representante del 50% de la población mundial. Sin embargo, nos sorprendió notar que la plataforma de acción estaba basada y manejada por el movimiento radical feminista y por miembros de organizaciones no gubernamentales, algunos de ellos homosexuales y lesbianas.
Pudimos ver también a representantes de afiliación izquierdista, tupamaros y neo-marxistas. Otro dato muy importante es que el dinero que se usará para este nuevo programa está condicionado y sólo será concedido a los países que acepten las leyes aprobadas. Y lo peor todavía es que los fondos serán entregados en un 60% a las organizaciones no gubernamentales, Según ellos, para su eficiente aplicación. Aunque la mujer haya alcanzado, en los últimos años, cierto reconocimiento en su vida profesional, social y familiar, no ha sido suficiente para compensar el marginamiento, abuso, atropello, violencia, discriminación y desigualdad de que es objeto en la sociedad machista nuestra. Lo ideal sería que al poner en práctica este documento se lograra ese estado saludable, justo y necesario que a gritos clama la dignidad de la mujer. Lo triste es que este documento es sólo una fachada para promover a la mujer y, en cambio, su objetivo principal está hábil y sutilmente disfrazado, manipulado y premeditado. Lo que se persigue realmente es crear un nuevo sistema de vida, ignorando y pisoteando los valores morales, éticos y religiosos que fundamentan la sociedad actual. Se trata de una revolución social peor que el comunismo. Según esta teoría feminista, los patrones de conducta, la educación, la cultura, la familia, las tradiciones, las costumbres, las leyes naturales actuales no tienen razón de ser: todos somos producto del ambiente, estamos condicionados por la religión y los pensamientos antiguos. Biológicamente hablando el hombre y la mujer son iguales. El individuo debe tener libertad absoluta para escoger su género, su modo de vida, su predilección sexual. No hay límites ni condicionamientos. Todo es permitido. Todo, todo. A pesar de lamentar en voz alta sobre los derechos humanos y la ferviente promoción de la familia como unidad básica de la sociedad, las naciones más ricas se las arreglaron para eliminar cualquier referencia a los derechos en el contexto de la reunificación familiar. Además, en ninguna parte el documento reconoció que las mujeres han sufrido inaceptables, a menudo medicamente serias, complicaciones por algunos métodos contraceptivos, ni confronta el hecho de que muchos de los más recientes métodos colocan el control enteramente en manos de los proveedores de salud antes que en las mujeres. Continuaremos con el género y la inoperancia de las Naciones Unidas... Abril, 1995.
댓글